LAURENT PERRIER Hay 2 productos.

Laurent-Perrier remonta su fundación hasta 1812, cuando un ex tonelero y embotellador con el nombre de Alphonse Pierlot compró dos parcelas de tierra llamado "Plaisances" y "La Tour Glorieux" en Tours-sur-Marne. Pierlot legó su compañía a su jefe de bodega, Eugene Laurent, que lo dirige con su esposa, Mathilde Emilie Perrier. Después de que Eugene Laurent muriese en 1887 su viuda, Mathilde, tomó el control y se une su nombre a la empresa, el cambio a Veuve...  Más

Laurent-Perrier remonta su fundación hasta 1812, cuando un ex tonelero y embotellador con el nombre de Alphonse Pierlot compró dos parcelas de tierra llamado "Plaisances" y "La Tour Glorieux" en Tours-sur-Marne. Pierlot legó su compañía a su jefe de bodega, Eugene Laurent, que lo dirige con su esposa, Mathilde Emilie Perrier. Después de que Eugene Laurent muriese en 1887 su viuda, Mathilde, tomó el control y se une su nombre a la empresa, el cambio a Veuve Laurent-Perrier. Veuve Mathilde llevó a la empresa a un gran éxito, la producción de 50.000 botellas de Champagne. Este éxito duró poco tiempo, debido al estallido de la Primera Guerra Mundial y la interrupción que trajo a toda Francia y a los negocios franceses. A raíz de esta catástrofe, Veuve Mathilde contrató Alexander Fletcher Keith Mackenzie para introducir y comercializar Laurent-Perrier en el Reino Unido. En 1925 Veuve Mathilde murió, dejando a la empresa a Eugenie Hortense Laurent. Debido a los reveses de la Primera Guerra Mundial y el inminente estallido de la Segunda Guerra Mundial, Eugenie vendió la compañía a Mary-Louise Lanson de Nonancourt en 1939 - Marie-Louise invirtiendo todo lo que pudo en la empresa, manteniendole a flote a través de los tumultos de la guerra , en un momento hipoteca 1.000 botellas de Champagne que había escondido en una pared. Su hijo mayor, Maurice, murió durante la guerra en el campo de concentración de Oranienburg dejando a su hermano más joven, Bernard de Nonancourt, como el heredero aparente. Al regreso de Bernard de la guerra, su madre comenzó a fijar en él la educación en todos los aspectos del Champagne que se hace en las casas del Lanson y Delamotte. En 1949, Bernard de Nonancourt se hizo propietario de la empresa y vió como se convertía en una de las más grandes casas de Champagne de propiedad familiar. De hecho la familia de Nonancourt todavía conserva una participación mayoritaria en la compañía hasta la fecha.